lunes, 28 de mayo de 2007

Los monos y los plátanos

Un grupo de científicos realizó la siguiente experiencia: encerraron a cinco monos en una gran jaula, en cuyo centro colocaron una escalera y sobre ella, un racimo de plátanos. Cuando un mono subía por la escalera para alcanzar los plátanos, los científicos lanzaban un chorro de agua fría sobre los que quedaban en el suelo. Al cabo de unos días, cuando un mono iba a subir por la escalera, los otros se lo impedían como fuese agarrándolo y golpeándolo.


Pasado algún tiempo, ningún mono subía por la escalera a pesar de la tentación de los plátanos. Entonces, los científicos sustituyeron a uno de los monos. El nuevo mono lo primero que hizo fue tratar de subir por la escalera, siendo rápidamente detenido por los otros. Después de algunas palizas, el nuevo integrante del grupo ya no lo intentó más.


Un segundo mono fue sustituido y ocurrió lo mismo. El primer sustituto participó con entusiasmo de la paliza al novato. Un tercero fue cambiado y se repitió el hecho. Finalmente el cuarto y último de los veteranos fue sustituido.


Los científicos se quedaron, entonces, con un grupo de cinco monos que, aún cuando nunca habían recibido un baño de agua fría, continuaban golpeando a aquel que intentase llegar a los plátanos


Si hubiera sido posible preguntar a algunos de ellos por qué pegaban a quien intentaba subir la escalera, posiblemente la respuesta hubiera sido: "No sé, las cosas siempre se han hecho así aquí" “Es la tradición” “Es así cómo se deben hacer las cosas”...


¿Te suena esta respuesta?


Aprovecha esta semana para preguntarte por qué estás haciendo las cosas en las diferentes áreas de tu vida de una manera determinada y si tal vez las podrías hacer de otra forma.



"Es mas fácil desintegrar un átomo que un prejuicio" Albert Einstein